La ecografía del primer trimestre la realizaremos entre la semana 11 y 14 de gestación, en las que el bebé medirá entre 45 y 84mm. Idealmente, la realizaremos en la semana 12, ya que es en este momento en el que el bebé ha alcanzado un tamaño y un desarrollo anatómico que nos permitirá comprobar que los órganos principales se han formado correctamente. 

¿Cuáles son los objetivos de esta ecografía?

1. Tipo y datación del embarazo

El punto de partida será la confirmación del tipo de gestación: única o múltiple. En caso de tratarse de un embarazo gemelar, comprobaremos qué tipo de gestación gemelar es: si ambos bebés comparten una misma placenta (gestación monocorial) o si cada bebé tiene su propia placenta (gestación bicorial). 

Además, mediremos al bebé desde el cráneo hasta el raquis -‘longitud cráneo-raquis’ (LCR) o ‘longitud cráneo-caudal’ (LCC)- y en función de esta medida estableceremos tu ‘fecha de última regla por ecografía’, determinando de manera precisa de cuántas semanas estás embarazada y tu fecha probable de parto. Si la gestación se ha obtenido por técnicas de reproducción asistida, tu clínica te especificará de cuántas semanas estás en función del procedimiento realizado, ya que como en estos casos sabemos el momento exacto en el que se ha producido la concepción, no re-dataremos la gestación.

2. Cribado de alteraciones cromosómicas

La ecografía del primer trimestre es el momento en el que podemos realizar el cribado de problemas cromosómicos. El cribado lo que nos permitirá es estimar el riesgo de que el embarazo este afecto por una alteración cromosómica, como es la trisomía 21 o síndrome de Down. 

Para ello, mediante una ecografía exhaustiva, realizaremos la medición de la translucencia nucal (TN). La TN es el líquido que se acumula en la nuca de los bebés, y el marcador más importante de alteraciones cromosómicas. Además, evaluaremos los marcadores secundarios: la presencia del hueso nasal, el flujo a través del ductus venoso y el funcionamiento de la válvula triscúspide del corazón. Combinando estos hallazgos ecográficos con los valores de las hormonas producidas por la placenta y tu edad, obtendremos un riesgo individualizado de alteraciones cromosómicas para tú embarazo.

3. Evaluación morfológica

En este punto del embarazo la mayoría de los órganos del bebé ya se han formado. En este momento, una ecografía de alta resolución llevada a cabo por un ecografista experto puede detectar hasta el 60-70% de las alteraciones morfológicas que van a aparecer durante la gestación. 

Mediante una ecografía detallada, podremos evaluar el perfil fetal, el cráneo y el cerebro, la médula espinal, la integridad de la piel de la espalda, las estructuras básicas del corazón, la pared abdominal y la presencia de estómago y vejiga fetal. 

4. Cribado de preeclampsia

La preeclampsia (hipertensión durante la gestación) es una de las patologías más importantes que puede desarrollarse durante el embarazo. Gracias a estudios recientes, sabemos que, en aquellas pacientes con alto riesgo de desarrollar esta enfermedad, su aparición puede prevenirse en un alto porcentaje de los casos mediante la instauración de tratamiento con ácido acetil salicílico de manera precoz. 

Mediante la combinación de tu historia personal, el cálculo de tu presión arterial media y la medición por ecografía del flujo por tus arterias uterinas, podremos estimar tu riesgo personal de desarrollar preeclampsia durante el embarazo.

En función del resultado de la ecografía, resolveremos las posibles dudas y valoraremos la necesidad de realizar otras pruebas o de establecer un tratamiento adecuado según los hallazgos.